GALAXY TALES #3| Linaje Imperial

GALAXY TALES #3

Linaje Imperial

El Imperio Zhell es uno de los gobiernos más importantes de toda la galaxia. Tras su formación en el año 10116 ADC, se ha expandido a lo largo y ancho de la Galaxia, conquistando una gran cantidad de sistemas estelares. Un gran imperio debe contar con un gran líder para mantener su grandeza por tanto tiempo, y en el Imperio Zhell este puesto recae en el Emperador. Un puesto que es elegido cada 25 años galácticos. El hijo más fuerte e inteligente de cada casa noble es elegido para realizar una serie de pruebas, y luego ser votado por el senado imperial, para ser elegido futuro emperador.

El actual Emperador de Zhell es Prétinax Primero de la casa Druia, elegido emperador en el año 15 ADC, tras ganar las elecciones, continuando con el régimen de la casa Druia de 575 años. Prétinax fue el emperador que comenzó la batalla de Cordiacon, y tras el fracaso de conquista su simpatía en el senado imperial vino a la baja, por lo que la casa Druia comenzó a ser más exigente con sus jóvenes que tenían el deseo de postularse al cargo de emperador, para así no perder en las próximas elecciones. El deseo de Prétinax, era que su linaje siguiera estando en el poder, por lo que decidiría entrenar por su propia cuenta a sus dos hijos.

5 años DDC

Sistema: Zhellquark

Planeta: Zhell

En el enorme palacio imperial, ubicado en Quaar, la capital de Zhell, se encontraban los hijos del Emperador, Prétinax hijo y Volus, de 22 y 18 años respectivamente. Ambos estaban vestidos con sus armaduras de batalla, relucientes placas de brillante metal, que cubrían las partes más vulnerables de su gruesa y escamosa piel verde, sus largas cabelleras negras estaban trenzadas con adornos dorados y brillantes, y sus afiladas dagas colocadas en sus guardas. Prétinax hijo, era el más alto de los hermanos, y su piel era de un color verde muy intenso, mientras que la de su hermano parecía más de un color marrón con detalles verdes.

Ambos caminaron por unas escaleras hasta llegar a una enorme habitación circular, repleta de ventanas que permitían observar la inmensa ciudad situada dentro de un enorme cañón. Su padre se encontraba en el centro de la habitación dándoles la espalda. Se giró hacia ellos cuando se encontraban a cinco metros de él.

—Hijos míos, sé que han dedicado mucho de sus vidas para algún día aspirar al puesto de Emperador de Zhell —dijo su padre, soltando unos graves y profundos sonidos en lengua zhelles— Sin embargo, como han de saber, el Senado Imperial no está muy contento con mi mandato, y las otras casas están entrenando a sus jóvenes con una mayor exigencia. Así que ustedes, como hijos de Prétinax Primero, deben de ser los más fuertes.

Prétinax hijo y Volus se vieron entre ellos con una cara de confusión.

—Deben de ser los más fuertes, los más aguerridos guerreros, los más sabios lideres —dijo su padre mientras su voz se volvía más estruendosa y enérgica— No debe de haber nadie por encima de ustedes, ni siquiera su propia sangre.

Esa última frase confundió a los hermanos.

—Por eso los cité aquí hoy, deben de demostrar quien de ustedes es mi digno sucesor.

—Por supuesto, padre —dijo Prétinax hijo mientras hacia una reverencia.

—¿Qué debemos de hacer para demostrarlo? —preguntó Volus con ingenuidad.

—Matar al otro —respondió el padre con una voz fría y sin emociones.

Volus se sorprendió y retrocedió unos pasos, no lo comprendía. ¿Su padre sería capaz de hacer pelear a sus dos hijos hasta la muerte?

5 años ADC

Sistema: Eros

Planeta: Thualu

Thualu, ubicado en el Núcleo externo, es el planeta hogar de la Casa Druia, este está dividido en feudos, distribuidos entre las familias de la casa. En el trópico superior del planeta, se encontraba el feudo de la familia del Emperador Prétinax. La región estaba repleta de sabanas y praderas donde los siervos de la familia se dedicaban a la crianza de una gran cantidad de animales de ganado.

En la mansión de la familia, una enorme casa de piedra y madera, se encontraban Prétinax hijo y Volus jugando con unas dagas sin filo en el enorme patio de la casa. La madre de Volus y madrastra de Prétinax hijo se encontraba sentada a algunos metros siendo alimentada por sus siervos.

La madre, Minarva de Arcadia, una zhell de rasgos finos, cabellera negra que casi tocaba el suelo y una piel marrón verdosa, había sido esposa del señor feudal de una de las regiones más importantes de Arcadia, uno de los planetas mineros emblema del Imperio Zhell. Lucius de Arcadia dominaba la mayoría de las minas de boriaperita y otros minerales raros, lo que lo convertía en uno de los seres más influyentes de la región. Lucius y Minarva habían estado casados, hasta que un grupo de zhells de la casa Druia, atacó la mansión de la familia de Lucius como venganza por la negativa de ayudar a la casa Druia a obtener poder político en el senado imperial con el apoyo de Arcadia. Uno de estos zhells era Prétinax, que asesinó con sus propias manos a Lucius. Este tomó a Minarva cómo su sierva y se la llevó a Thualu para servirle a él y a su en ese tiempo esposa, Thea de Druia.

Algunos años después, en el año 17 ADC, Thea falleció dando a luz a Prétinax hijo mientras que Prétinax se preparaba para su candidatura al puesto de Emperador. Dos años después, Prétinax ganó las elecciones y fue elegido Emperador, por lo que tuvo que elegir a una emperatriz consorte, siendo esta Minarva de Arcadia, con la que tuvo su segundo hijo, Volus.

Mientras los dos hermanos se encontraban jugando, Volus golpeó por accidente a su hermano en el rostro. Le comenzó a brotar sangre morada de una abertura formada en la parte lateral de su cabeza.

—¡Prétinax! —le gritó su madre— No muestres debilidad ante tu hermano.

—No, madre —respondió Volus— Solo fue un accidente, yo no quería herirlo.

—Así es madre Minarva —dijo Prétinax hijo— Solo estamos jugando, no pasa nada.

—La fuerza no es un juego, ustedes están destinados a convertirse en fuertes guerreros —respondió su madre con desprecio en su voz— No deben de mostrar compasión, ni siquiera por los de su propia sangre. Nunca sabrán cuando podrían ser traicionados.

Momentos después llegó Prétinax, el padre, con su imponente armadura dorada y negra. Se acerco a Minarva y frotaron sus rostros en señal de cariño. Se acercó y realizó el mismo gesto con Volus y Prétinax hijo.

—¿Qué sucede aquí? —preguntó su padre.

—Le estoy enseñando a tus hijos a ser fuertes, y a no dejarse humillar por otros —respondió la madre— Y creo que a Prétinax aún le queda mucho que aprender para su edad.

—¡Eso no es cierto! —le gritó Prétinax hijo— Yo se bastante bien lo que un guerrero debe de hacer, y estoy a un año de irme a la academia, soy más que capaz.

—Lo sé hijo —respondió Prétinax padre— Pero, si tu hermano menor es capaz de realizarte una lesión, imagina lo que los chicos de tu edad son capaces de hacer.

Prétinax hijo salió corriendo, escaló uno de los muros del patio y fue a esconderse a una hierba alta a las orillas de un riachuelo que llevaba poca agua. Se sentó y comenzó a llorar mientras una bruma de pensamientos lo invadía. Irá, temor, tristeza y rencor lo sumían en la desesperación. Su mente se llenaba de ideas: «Madre Minarva tiene razón», «Soy muy débil», «Todo es más fácil para Volus», «Tengo que ser mejor que los demás». Comenzó a llorar desconsoladamente mientras la estrella blanco amarillenta, que da vida al planeta, se escondía en el horizonte sin fin de las secas planicies de Thualu.

5 años DDC

Prétinax hijo sacó lentamente una de sus dagas. Mientras apretaba el puño con fuerza, cerró los ojos e hizo una respiración profunda.

—¡¡¡Hermano!!! —grito Prétinax hijo mientras abría los ojos— Estoy preparado para tomar mi lugar como digno candidato al puesto de Emperador.

—Si es así, colóquense a los extremos —dijo el padre— Y comiencen.

Prétinax hijo caminó al extremo contrario de su hermano y se colocó en posición de batalla. Su padre les dio la señal y el duelo comenzó. Prétinax se lanzó al ataque rápidamente, con su fuerte brazo cargó contra el cuello de su hermano, pero fue detenido por los agiles reflejos de Volus.

—¿¡De verdad tenemos qué hacer esto!? —gritó Volus a su padre.

Este no respondió, observó fríamente a ambos e inclino la cabeza. Prétinax aprovechó la distracción de su hermano para derribarlo, en el suelo realizo rápidos movimientos con la intención de clavar alguna de sus dagas en el cuerpo de su hermano, sin embargo, con gran agilidad logró esquivar todos los ataques.

—Perdón hermano, yo no quiero hacer esto —dijo Volus, mientras sacaba su segunda daga.

—¡¡¡Ataca ya!!! — le gritó Prétinax a su hermano.

Volus corrió hacia su Prétinax, dio un salto con la daga en la mano, preparándose para atacar a su hermano desde el aire. Con un bloqueo oportuno, Prétinax bloqueó el taque despojando a Volus de una de sus dagas, después con su otro brazo cortó la otra mano de su hermano. Prétinax clavo una de las dagas en Volus, este cayó al suelo.

—Siempre fuiste el mejor guerrero hermano —le dijo Volus a su hermano con una voz débil— Siempre he estado orgulloso de ti.

Prétinax se quedó unos segundos viendo el cuerpo sin vida de su hermano, y le susurro algo al oído.

—Bien hecho hijo— dijo su padre con una voz libre de cualquier emoción.

Prétinax hijo se levantó y salió de la habitación sin dirigirle la mirada a su padre.  Se dirigió a los jardines del enorme palacio, vio un hierbazal que se encontraba apartado del resto de vegetación, entró, y comenzó a llorar.